EL DESPRECIO DEL PP HACIA LA GENTE

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           EL DESPRECIO DEL PP HACIA LA GENTE.

 
Por demás está decir que el PP no respeta a los votantes; a los suyos, parece pensar, no hay que repetarlos, ya que solo habiéndose perdido el respeto a sí mismos es que han podido votarnos , a los otros, a los que no nos han votado, que les den (como a los nuestros).

Y darles, darles palpelo, bien, pero bien que bien, nos  están dando. Esto es puro franquismo, se gobierna para una clase, y se dicen las cosas más peregrinas para justificar los actos más injustificables; si el otro se revuelve, sale el y-tu-más, que lo único que oculta es un y-tu-tambien, y a seguir palante. 

 


Las ruedas de molino, según el tiempo pasa, son tan fenomenales, que únicamente una mala fe indigna puede hacer que pasen por argumentos en un mundo adulto. Pero esa mala fe, parecen creer en el PP, es muy frecuente, como si se dijeran: son de los nuestros y pasarán por todo. Una secta.

           En la calle encontrarás a muchos amigos que también tratan de salvarse del incendio.      
              Cada      cual tiene su fórmula. Uno ya no compra ningún periódico, solo lee a Catulo     y  a Montaigne, trata de regenerarse escuchando a Mozart y a Schubert
 
                                                                                                                        Manuel Vicent
 
                              http://elpais.com/elpais/2015/03/13/opinion/1426246915_306975.html

Hace unos días,  el pétreo  caballero señor don Mariano Rajoy, en funciones de Presidente del Gobierno, supongo, porque ya no se sabe si habla por el PP o por el Gobierno, dijo que se podrian crear tropecientos millones de puestos de trabajo.
Vamos a dejar olvidada la pregunta sobre qué tipo de trabajo es el que se puede crear, porque contestar esa pregunta exige tener un proyecto de país y el señor Presidente carece manifiestamente de él.

 
La cuestión es que esa cantidad de puestos de trabajo que podrían, según él, crearse, han de ser puestos de trabajo en algo, se han de dedicar a hacer algo. ¿Pero a hacer, qué?  La pregunta no es tan tonta como parece,  si se considera que los empleos destruídos lo han sido por la llamada crisis y burbuja inmobiliaria y anexos : ¿Piensa el señor Presidente del Gobierno que es posible otro estallido inmobiliario a corto plazo, para sacar del paro a los que ahora lo están y volver a ponerlos a colocar ladrillos? Si no es así, ¿podría el señor Presidente del Gobierno indicarnos en qué sector, o sectores, cree ál que se va a crear el empleo que nos promete? ¿ Cree que los bancos alemanes o franceses van a dar otra vez crédito a la banca nacional para que desarrollen una nueva burbuja ladrillal? €n fin: BLABLALITIS, que gobernar es muy difícil, según nos enseñó en el último debate sobre el estado de la Nación, y comprobamos  al mirarle.

Hoy mismo, esa falta de respeto ha alcanzado un lugar superferolítico en la escala de la infamia, cuando, no ya desde el PP, desde la propia Administración del Estado, para defender lo indefendible dentro del ámplio marasmo de las diversas corrupciones de ese Partido, lo han comparado con Cáritas o la Cruz Roja, en orden a excluirle de responsabilidad por su financiación ilegal.
                                             PP defraudador de impuestos
                                                                  Por: Iñaki Gabilondo
                                          http://blogs.elpais.com/la-voz-de-inaki/2015/03/pp-defraudador-de-impuestos.html

Hay muchísimos más ejemplos de la ausencia absoluta de respeto por parte de la dirección actual del Partido Popular hacia la gente en general, hacia la que les vota y hacia la que no. 

 

Aunque yo, en mi desesperacion tiendo a pensar que esa ausencia de respeto está por demás justificada, no puedo dejar de cabrearme y decirme: ¿pero porqué nos tratan así? ¿cómo es posible que no se corten un mínimo en ocultar el desprecio que sienten por nosotros?
ESPAÑA ESTUPEFACTA
 
                                                       Él sabe
                                                                      Y nosotros, que no tenemos ni idea de nada, a tirar de                                                               la estupefacción. Se nos ha acabado el asombro
                                                                  Juan José Millás
                                                                http://elpais.com/elpais/2015/03/12/opinion/1426173775_854842.html

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